Instalada la gárgola monumental realizada por el alumnado y profesorado de la Escuela de Arte Gaspar Becerra en San Juan Bautista de Baeza.
La guardiana de las artes
Este curso académico 2023/24 se constituyó un grupo de trabajo en la Escuela de Arte Gaspar Becerra de Baeza, bajo la supervisión del CEP de Úbeda. La finalidad del mismo ha sido la creación, en el centro educativo, de un espacio físico y tecnológico donde materializar ideas a través de la tecnología y donde poder compartir conocimiento. Este espacio tiene ya un nombre propio: el hub.
Entre las distintas actividades desarrolladas en este contexto, la que más destaca es la creación de una escultura monumental, a partir de un modelo digital 3D. Tanto profesorado como alumnado tuvieron la oportunidad de presentar diversas propuestas y, tras la votación pertinente, resultó elegida una gárgola, guardiana de las artes y del conocimiento plástico.
A partir de ahí, docentes y alumnado de todas las especialidades que se imparten en el centro (Bachillerato y ciclos formativos de Forja artística, Técnicas escultóricas, Gráfica publicitaria y Animación 2D y 3D) se pusieron manos a la obra con un proyecto que aúna técnicas tradicionales con las tecnologías 3D más avanzadas.
La figura de la gárgola fue modelada por ordenador con Blender y formas low poligonales a partir de imágenes de referencia. Esto es lo que le otorga ese aspecto característico de estar compuesta mediante triángulos en su superficie.,
Posteriormente, se eligió el tamaño del modelo y, con el programa Pepakura, se realizó el desplegado bidimensional del modelo 3D. Las 1.413 plantillas triangulares resultantes (numeradas en sus bordes para poder componer el mosaico) se imprimieron en formato A3, se recortaron y se pegaron sobre cartón desechado para reciclar, y así se pudieron recortar las piezas en cartón para poder darle consistencia. El siguiente paso fue unir los triángulos de este enorme puzle con la ayuda de la numeración de las aristas. Debido a las dimensiones finales que tendría la figura, se hicieron por separado la cabeza, las patas, las alas… para posteriormente unirlas, en el recinto de la escuela de arte, pero ya fuera del edificio. A continuación se encoló exteriormente y se le aplicó pintura gris impermeabilizante.
Aunque inicialmente la idea era que esta escultura monumental tuviera un carácter efímero (instalándola en el exterior y que la intemperie la fuese destruyendo poco a poco), la cantidad de horas que ha requerido su montaje y el esfuerzo invertido merecían una mayor durabilidad, por lo que se le ha revestido de fibra de vidrio con resina de poliéster en su superficie para alargar su duración.
Terminada la gárgola, la Escuela de Arte ha contactó con el Ayuntamiento de Baeza para sondear la posibilidad de ubicarla en algún lugar relevante de la ciudad y, desde la concejalía de Cultura, se decidió que se ubique en las ruinas del templo románico de San Juan Bautista y así darle más realce, que la gente pueda conocer el trabajo de la Escuela y que pueda ser disfrutada por más público.