El teatro municipal de Ibros era el escenario abarrotado donde actuaban el pasado sábado las chirigotas y comparsas encargadas de hacer pasárselo bien a un público entregado que no dejó asiento libre en este emblemático espacio público.
Un evento al que seguía ayer domingo el desfile infantil, el tradicional pasacalles y el concurso individual y grupal de disfraces.