Bartolomé Cruz, concejal de Obras y Urbanismo de la ciudad de Baeza, se ha trasladado hoy hasta el Paseo de la Constitución para dar cuenta del inicio de actuaciones en este emblemático espacio donde el edil explicaba que, en este momento, se trata de saber qué materiales compones el subsuelo, por lo que se está realizando el correspondiente estudio geotérmico, con 10 sondeos (ocho de ellos de 6 metros, y otros dos de 12 metros).
Cruz Sánchez explicaba que se estudia la posibilidad, no sólo de un parking subterráneo, tal y como los dos partidos que componen el gobierno municipal llevaban en su programa electoral, sino también de estudiar la opción de una vía subterránea que vaya desde la Plaza de la Fuente de Los leones hasta las Barreras y la calle San Francisco, atravesando el Paseo.
En este punto, el concejal detallaba que lo que hasta ahora ha salido en los sondeos son margas y una lastra de piedra caliza, aunque en la Avda. Eusebio Ortega se ha hallado una lastra importante de piedra viva que, si hubiera en más puntos de sondeo que se practican, llevaría a descartar la intervención en el subsuelo.
Cruz señalaba que espera que los resultados, en este sentido, sean positivos, aunque se trata de un proyecto muy complejo que también va a incluir las pertinentes catas arqueológicas de estudio en este emblemático espacio.
En cualquier caso, el gobierno local deberá agilizar todos los procesos, ya que según explicaba el concejal, para llevar a cabo este proyecto, para el que hay destinados 3 millones de euros, disponen de dos años, puesto que el plazo para ejecutarlo acaba en octubre de 2025.
En la misma línea, el concejal de obras y urbanismo se ha referido al Mercado de Abastos o las Casas Consistoriales Altas, argumentando que no entiende porqué el anterior equipo de gobierno demoró tanto estas actuaciones cuyos plazos de ejecución van a hacer complicado el poder cumplirlos, aunque -asegura Cruz Sánchez- lo van a intentar con rodo el empeño.
Finalmente el concejal ha hablado de la visita hoy a la piscina cubierta de los responsables de ejecutar la intervención y ha señalado que hay varios problemas en la obra, como de deslizamiento en la superficie, un rebosadero por el que se sale el agua o acero inoxidable que se oxida. Todo ello está. según afirmaba, retrasando la puesta en servicio de este nuevo recurso tan esperado en la ciudad.