Este pasado domingo 18 de diciembre, a las 13:30 horas daban comienzo los actos del día grande de la «Festividad de la Traslación de San Isidoro a León», que desde tiempo inmemorial celebra la Muy Ilustre, Real e Imperial Cofradía del Milagroso Pendón de San Isidoro y cuyo colofón ha sido el cambio de abad por haber concluido su mandato el actual Hermenegildo López González.
Para los más profanos decir que el origen de esta festividad de la «Traslación» hunde sus raíces en el siglo XI, concretamente en el año del Señor de 1.063. La piedad y el patriotismo del buen monarca Fernando I, el Magno y su esposa Dña. Sancha I, trajeron a esta Corte de Reyes las Sagradas Reliquias de San Isidoro de Sevilla. Los restos del Santo a su llegada a León, el 21 de diciembre del 1063, fueron acogidos con la solemnidad de los grandes fastos medievales por toda la familia Real y por todo el pueblo de León y depositados en la Iglesia de San Juan Bautista, que Alfonso V, padre de la Reina Sancha había reedificado años atrás de la ruina que en ella había obrado nuestro mayor enemigo, Almanzor, el Atila medieval del Reino Leonés.
Dicho esto y volviendo al motivo de esta reseña debemos añadir que previamente en la capilla del Santo Martino de la Real Colegiata de San Isidoro se realizó el acto de despedida del Abad saliente Hermenegildo López González y la presentación a los caballeros y damas cófrades del nuevo Abad, Gonzalo F. González Cayón. Tras este acto tuvo lugar la procesión por el interior del templo desde la citada Capilla del Santo Martino hasta el altar mayor de la Real Basílica, y que como novedad este año presentaba los nuevos atributos regios de los Reyes de León (aún sin concluir ya que les falta la pedrería, estado prevista su finalización para el Responso de los Reyes de León que se celebrará el próximo 6 de enero).
Llegados al Altar Mayor y tras ocupar los cófrades los asientos reservados al efecto, dio comienzo la «Solemne Celebración Eucarística», con la «Ofrenda Anual al Santo Patrón» con la histórica entrega del cirio.
Finalizada esta celebración eucarística, ha tenido lugar la imposición de hábitos y entrega de diplomas a los diez nuevos miembros, entre los cuales se encuentran cinco baezanos, así como el nombramiento como Ilustre Caballero Cofrade de Honor, al General del Mando de Artillería de Campaña y Comandante Militar de León, D. Vicente Torres Vázquez.
Tras los discursos del Abad Saliente, Hermenegildo López, para presentar los méritos del General Vicente Torres Vázquez para su nombramiento como nuevo Caballero Cofrade de Honor, se procedió a la imposición del hábito a los neófitos y a la ceremonia de traspaso de poderes con la simbólica entrega del Imperial, Milagroso e Invicto Pendón, del Abad saliente al Abad entrante, al ser el máximo representante, “debiendo defenderlo hasta la muerte” según consta en algunos documentos antiguos de la Reconquista hispana, así como por su condición honorífica de “Capitán General de los Ejércitos” así como de los demás atributos del cargo.
Esta ceremonia, una de las más importantes de esta Imperial Cofradía, conmemora el aniversario de la traslación de los restos de San Isidoro de Sevilla a León, en el año 1063, hecho éste del que se cumplen ahora 959 años.