Con este son ya 38 los años los que Grupo Oleícola Jaén de Baeza ofrece el desayuno molinero para saborear los primeros AOVEs de la campaña
En el día de ayer, la empresa Oleícola Jaén celebro el inicio de campaña con su ya tradicional desayuno mediterráneo a pie del olivar, en la finca “Llanos de Ochoa”, cerca del valle del Guadalquivir a unos kilómetros de las primeras estribaciones de Sierra Mágina, en el término municipal de Baeza, donde los invitados pudieron degustar el AOVE Frantoio obtenido en el primer día de cosecha y disfrutado a la vez de la minuciosa recolección de estos grandes frutos.
En la actualidad, toda la operativa de las fincas de sus distintas variedades, están sometidas a un riguroso y exigente control de calidad, afectando a cada una de sus fases y épocas del año, bajo la premisa del mantenimiento de una agricultura siempre respetuosa con el Medio Ambiente, asesorada en todo momento por la empresa de Ingeniería IADA, S.L. que es capitaneada por Marino Uceda, uno de los padres de la olivicultura moderna.
Además del equipo de Grupo Oleícola Jaén, familiares y amigos, han asistido al desayuno; Juan Vilar, Consultor Estratégico, Enrique Delgado, Secretario General INFAOLIVA y representantes de las asociaciones agrarias; Luis Carlos Valero (ASAJA-Jaén), Juan Luis Ávila (COAG-Jaén) y Elio Sánchez (UPA-Jaén)
La empresa Oleícola Jaén S.A., se ha convertido en un referente importante en la provincia, siendo su actividad principal la molturación de aceituna para la obtención del Aceite de Oliva Virgen y envasado de Aceite de Oliva Virgen Extra (premium) con su marca Oleícola Jaén AOVE, de la cual, ya disponen de 6 excelentes variedades de AOVEs monovarietales.
El desayuno molinero ha tenido como principal protagonista el primer AOVE Frantoio de la temporada, extraído del fruto recogido en el primer día de campaña. Esta es una variedad de aceituna originaria de la Toscana Italiana. Este es AOVE muy aromático, con frutado de manzana, papilla de frutas, almendra, hierbas del campo, con un ligero amargo y un picante de guindilla en boca.
