La localidad de Begíjar acogió ayer la presentación oficial de la segunda edición de su Belén Viviente, una iniciativa que combina la tradición navideña con un marcado carácter benéfico. El evento, que se celebrará el próximo 27 de diciembre, destinará la totalidad de sus donativos a la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC).
El acto de presentación tuvo lugar en el Salón de Plenos del Ayuntamiento y estuvo presidido por el alcalde de Begíjar, Diego Soriano, junto a Manuel Escuderos Vargas, coordinador del proyecto. Asistieron también miembros de la corporación municipal, así como representantes de las asociaciones que componen el tejido social, cultural y religioso de la localidad.
El Belén Viviente se desarrollará en la céntrica calle Paso Castillo, creando un entorno escénico único abrazado por el histórico Torreón del Castillo y el Palacio Episcopal. La actividad se sustenta en una amplia movilización cívica, con la colaboración de catorce asociaciones locales y la participación de entre 200 y 300 figurantes.
El alcalde, Diego Soriano, destacó la rápida acogida que tuvo la iniciativa desde su primera edición, nacida del impulso ciudadano. «Es un placer para mí encontrarme hoy aquí […] rodeado de tanta, tanta buena gente, representantes de prácticamente todas las asociaciones del tejido asociativo local, sobre todo cultural y religioso».
En este marco, Soriano explicó que la iniciativa arrancó el año anterior -cuando un vecino, Ramón Escuderos, se acercó al Ayuntamiento- para hacerla participativa y colaborativa entre asociaciones.
«Decidimos hacerla expansiva y participativa a todas las personas, a todas las asociaciones del municipio […] tuvo un gran nivel de participación y la verdad es que la acogida fue muy buena». Y recordó que esto no sería posible sin la participación altruista de los vecinos y vecinas de la localidad.
Para finalizar, el primer edil de Begíjar extendió una invitación a la ciudadanía de las poblaciones cercanas, resaltando el valor cultural y gastronómico del evento. «Invito a que vengan los vecinos de los pueblos aledaños a conocer, a disfrutar de nuestro ambiente, de nuestro pueblo, de nuestra gente, también de nuestra gastronomía».
Por su parte, el coordinador del Belén Viviente, Ramón Escuderos Vargas, expresó su agradecimiento a todas las personas y entidades colaboradoras, subrayando el esfuerzo desinteresado que hay detrás de la organización.
Escudero Vargas relató que el proyecto surgió a raíz de una propuesta de su hija Alma, y afirmó el sentimiento de pertenencia que ha generado la iniciativa. «Nuestro Belén, y sí digo nuestro, porque es de todos. Desprende naturalidad, cercanía y unión. Y es algo que debemos mantener».
A pesar de los retos iniciales, Escudero Vargas se mostró optimista sobre la continuidad del evento. «Sé que los comienzos fueron complicados y a lo largo del tiempo seremos más o menos gente, pero si queremos podemos formar una actividad que perdure con el tiempo. Gracias por dejarme dirigir este bonito proyecto, que aún con poca trayectoria es uno de los más esperados del año», sentenció.
Puedo a puntarme al belén viviente todavía y donde hay que ir para apuntarse